El Desafío Generacional en Educación y en el Mundo Laboral: I Parte

Estamos observando en el panorama educativo y laboral, que la nueva generación, conocida como generación Z, presenta una serie de características que reflejan la transformación constante de las tendencias socioculturales y tecnológicas. Esta generación se caracteriza por su capacidad de adaptación a entornos tecnológicos en constante evolución, su enfoque en la inclusión y la diversidad, su búsqueda de significado y propósito en su educación y en su vida. Al comparar estas características con las de generaciones anteriores, se revela una interesante perspectiva sobre la evolución de las prioridades y valores en ambos ámbitos.

Hemos escuchado en varios discursos de autoridades que existe un choque generacional en instituciones de educación superior y en el mundo laboral (entre docentes y estudiantes o entre líderes y colaboradores), del cual los adultos tenemos que hacernos cargo. Desde nuestra perspectiva, este contraste generacional siempre ha existido, lo cual enriquece el entorno, la experiencia y los resultados, ya que las miradas o puntos de vista, así como, las características individuales potencian a los equipos de trabajo. La diferencia que se visualiza es un contraste más profundo que en otros periodos de la humanidad debido a que los cambios son más frecuentes, y en varias áreas simultáneamente, por lo que requiere que seamos más conscientes de nosotros, de los demás y los factores del entorno. No deja de ser un desafío al que debemos sacarle el máximo potencial.

Antes de desarrollar el tema, es importante destacar que, a pesar de que el estudio de las generaciones se ha realizado desde décadas, aún existen diferencias entre autores en cuanto a la exactitud de los años de nacimiento de cada generación, tanto respecto a su inicio como a su término, así como sobre las característica de cada generación. Esto en gran parte es debido a que cada persona es diferente y no la podemos catalogar según un tipo de clasificación, son generalizaciones de estudios. 

Actuales características de los estudiantes de educación superior y los nuevos profesionales

La generación de estudiantes que actualmente se encuentra en la universidad o los nuevos profesionales del mundo laboral son conocidos como la Generación Z. Esta se compone principalmente de personas nacidas a partir de mediados de la década de 1990 hasta cercanos de la década de 2010. Se caracterizan por haber crecido en un entorno altamente tecnológico y conectado, lo que ha influido significativamente en su forma de procesar la información, aprender, comunicarse y relacionarse con el mundo que les rodea. Prefieren modelos y técnicas digitales, como son el aprendizaje y comunicación por videos. También se distinguen por su enfoque en la diversidad, la inclusión y la sostenibilidad, así como por su capacidad para adaptarse rápidamente a entornos cambiantes, siendo la búsqueda de significado el propósito de sus vidas y su educación.

En un estudio de 161 estudiantes se observó que la mayoría de los estudiantes pertenecientes a esta generación tienen tendencias vocacionales hacia al arte, la medicina y a las carreras afines al área de la salud, debiendo equilibrar los intereses con las habilidades. Tienen consideración hacia las demás personas y requieren mayores competencias de liderazgo para implementarlas en el ámbito social. Prefieren el aprendizaje a través de la observación, les interesa más la práctica que la teoría, se abocan a la multitarea, pero con una corta capacidad de atención.

La mayoría de los autores indican que esta generación posee las siguientes características que sobresalen:

1. Conectividad tecnológica omnipresente: La generación Z ha crecido inmersa en un mundo digital que han integrado a la mayoría de las tareas de la vida diaria, lo que les ha conferido una habilidad innata para utilizar eficientemente las herramientas tecnológicas en su proceso de aprendizaje o en el ámbito laboral, en la comunicación y en la construcción de relaciones en diferentes plataformas. Esta habilidad les ha permitido acceder a una amplia gama de recursos educativos y les ha facilitado el aprendizaje autónomo y la investigación. Han demostrado la capacidad de utilizar la tecnología como una herramienta para fomentar y mantener relaciones significativas. Por otro lado, han desarrollado habilidades para construir redes y comunidades en línea, lo que les ha permitido expandir sus conexiones sociales y laborales más allá de las limitaciones geográficas.
2. Aptitudes para el trabajo colaborativo: Dada su experiencia en entornos digitales y su capacidad para comunicarse a través de diversas plataformas, la Generación Z tiende a ser hábil en el trabajo colaborativo y en la construcción de relaciones en línea, así como en entornos presenciales.
3. Inmediatez y multitarea: Debido a la rápida evolución de la tecnología, la Generación Z tiende a preferir la gratificación instantánea y se siente cómoda con la multitarea. Lo anterior, puede afectar su capacidad de concentración en tareas que requieren enfoque prolongado.
4. Resiliencia y adaptabilidad: Actualmente y en términos generales muestran una notable capacidad para adaptarse a entornos educativos o laborales en constante cambio, demostrando resiliencia y una actitud proactiva frente a la incertidumbre. La flexibilidad cognitiva les permite procesar y asimilar información de manera rápida y eficiente, permitiéndoles adaptarse a diversas situaciones y desafíos en su entorno académico y profesional.
5. Conciencia social y compromiso: Quienes son parte de la Generación Z muestran una mayor conciencia social y un compromiso con temas como la justicia social, la sostenibilidad y la igualdad. Están involucrados en causas que consideran importantes y buscan activamente formas de contribuir a un cambio positivo en la sociedad. Valoran la diversidad cultural, buscando entornos educativos o laborales que promuevan la inclusión y la equidad, fomentando así una comprensión intercultural más profunda y una mayor sensibilidad hacia las diferencias individuales.
6. Orientación hacia el propósito y la relevancia: Se inclinan hacia la búsqueda de significado y propósito en su educación como en su vida personal o laboral. Como estudiantes buscan aplicar su aprendizaje en contextos del mundo real y contribuir al cambio social y la innovación. Como trabajadores valoran las experiencias significativas y buscan trabajar en profesiones que les permitan contribuir al bienestar de la sociedad y hacer una diferencia en el mundo.
7. Pensamiento crítico: Por el gran acceso a la información que han tenido y las experiencias vividas, especialmente los más adultos de esta generación, han demostrado habilidades significativas de pensamiento crítico al evaluar la veracidad y la fiabilidad de las fuentes de información. Han desarrollado una comprensión sólida de cómo discernir entre información confiable y potencialmente engañosa, lo que les ayuda a tomar decisiones informadas y fundamentadas.

Algunos comportamientos de la generación Z, pueden presentar desafíos, como son:

1. Dependencia excesiva de la tecnología, lo que puede afectar negativamente su capacidad para interactuar de manera efectiva en entornos no digitales y su capacidad para concentrarse en tareas que requieren enfoque prolongado.
2. Falta de atención y paciencia, debido a su exposición a la gratificación instantánea y a la disponibilidad inmediata de información en línea, algunos miembros de esta generación pueden mostrar una falta de paciencia y tener dificultades para mantener la atención en tareas que requieren tiempo y esfuerzo.
3. Aislamiento social, a pesar de estar altamente conectados digitalmente, algunos pueden experimentar aislamiento social y dificultades para establecer relaciones significativas en entornos no digitales. La comunicación en línea puede reemplazar en cierta medida la interacción cara a cara, lo que puede limitar el desarrollo de habilidades sociales clave.
4. Presión por la imagen en redes sociales, lo que puede conducir a problemas de autoestima y autoimagen, ya que poseen una vida digital, los “likes” y las “visualizaciones” son importantes para su autoimagen. La comparación constante con los demás en entornos digitales puede generar ansiedad y afectar negativamente su bienestar emocional.
5. Dificultades para manejar el estrés y la ansiedad, al enfrentarse a un entorno altamente competitivo y en constante cambio. La presión académica y profesional puede contribuir a un aumento en los niveles de estrés.

Características de los docentes, líderes y jefes

Recordando lo mencionado en un inicio, tanto las instituciones de educación como las diferentes empresas tienen dentro de sus equipos, colaboradores de diferentes edades y, por ende, generaciones que deben interactuar en sus diferentes roles para realizar los procesos  con el objetivo de llegar a un resultado o meta. En este contexto, los más jóvenes serían los pertenecientes a la Generación Z quienes conviven con los Baby Boomer, X e Y.

La generación Baby Boomer son los nacidos entre  los años 1946 y 1964, y se caracterizan por la estabilidad laboral hasta llegar a una adicción al trabajo, así como por la conformidad con las normas sociales establecidas. Valoran la seguridad financiera y tienden a adoptar un enfoque más tradicional hacia la educación y la carrera profesional. Actualmente ocupan cargos altos o de poder dentro de las organizaciones, pudiendo aportar a la transferencia del liderazgo, experiencia y visión a largo plazo en la resolución de situaciones para los más jóvenes, siendo ejemplos de responsabilidad y confiabilidad.

Los nacidos en el rango de los años 1965 a 1981 son conocidos como la generación X, quienes se destacan por su independencia e inclinación hacia la autorrealización, pudiendo señalarlos como individualistas, pero interesados en la búsqueda del apoyo grupal y las mentorías. Valoran la autonomía en el trabajo y muestran una mayor aversión a las estructuras jerárquicas tradicionales en el entorno laboral y educativo. Los que trabajan son profesionales maduros, responsables y bien preparados. Se encuentran en cargos medios o altos en las instituciones aportando en la resolución de problemas de manera eficiente, con alto interés por el logro de las metas individuales y colectivas. Buscan el equilibrio entre su vida personal y el trabajo.

La otra generación que está involucrada en los contextos académicos y laborales son los Millennials o generación Y, la cual está conformada por las personas nacidas entre los años 1980 y 2004. Ellos se enfocan en la integración del trabajo y la vida personal, buscando un equilibrio entre ambas. Muestran una mayor afinidad por la tecnología emergente, conectados por medio de las redes sociales, y poseen una inclinación hacia el emprendimiento y la innovación, ya que buscan cambiar el mundo y ser mejores que sus padres. Están conscientes que el mundo es globalizado, deseando viajar y conocer diferentes países y culturas, presentando un bajo interés por afiliaciones políticas o religiosas. Laboralmente, presentan una baja lealtad con sus empleadores, ya que priorizan sus intereses personales, pudiendo irse del trabajo en cualquier momento si es que les aparece una oportunidad laboral mejor, pues requieren una constante retroalimentación y oportunidades de crecimiento personal y profesional.

Se puede establecer que cada generación presenta características propias derivadas los múltiples factores intervinientes, entre ellos podemos mencionar, la educación de la familia y formal, el contexto sociopolítico nacional e internacional como temas culturales. Una forma de observar estas diferencias proviene de un análisis realizado de las prioridades que tiene cada generación, descrito en el documento “Liderazgo Intergeneracional” de Nicolás de Asís, del cual  se extrae el cuadro resumen de las preferencias que tiene cada generación, en orden de importancia:

Las diferencias entre cada generación, en vez de generar temor o preocupación, deben ser valoradas y consideradas para construir un ambiente propicio que permita una educación de calidad en el mundo académico, tal como el logro de resultados en un ambiente colaborativo en el contexto laboral. Los altos directivos y docentes de educación superior como los líderes empresariales o de equipos laborales son los agentes claves que deben gestionar que confluyan todas estas características generacionales de manera armoniosa y productiva.

En esta primera parte del artículo, hemos revisado las características de la Generación Z, tanto de quienes estudian como de aquellos que ya han ingresado al mundo laboral, y las diferencias generacionales que tienen con sus directivos y docentes en el ámbito académico, como con sus jefes y líderes en el contexto profesional. En la segunda parte veremos cómo confluyen y cómo se pueden potenciar las diferentes generaciones en un contexto específico..

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